lunes, 7 de enero de 2008

De regreso a la escuela

Voy de nuevo a la escuela, esta bien, lo necesito. Pero no puedo evitar dos cosas: la nostalgia y el miedo.

Cuando hace dos días me desperté sabiendo que debía ir a la escuela, (universidad, colegio, beca lo que sea) hacia mucho frío, la noche anterior me tuve que levantar para echarme encima una cobija más y por la mañana me traslade a la época en que estaba en la secu o en la prepa. Envié un mensaje a mi mamá: Hace mucho frío mami, no quiero ir a la escuela ¿te acuerdas?.

La respuesta fue: abrígate bien hijita y vete a la escuelita. Claro que llego cuando ya había salido de bañarme y estaba a punto de salir.

En el camino recordé las mañanas heladas del tercer año de la prepa, cuando ya estábamos de nuevo en Torreón y mi papá salía envuelto en chamarras y pantaloneras, que debajo tenían la pijama y un café en la mano, para encender el viejo Datsun amarillo 15 o 10 minutos antes de nuestra partida y aunque a veces tenía prisa no lo convencía de empezar a andar porque era un carro viejo que necesitaba calentarse.

Ahora voy en auto, que de alguna manera ya es mío, a una de las universidades privadas más importantes y caras del país. Yo que siempre quise estudiar en la UNAM.

Pensé en los tiempos del Iscytac La-Salle; la hueva de levantarme para la clase del Lic. Hurtado; los desmadres en los pasillos; las trasnochadas de los trabajos en equipo que terminaban con una chela en La Troje; el calor insoportable del verano en La Laguna que me dormía en el camión de regreso a casa; mis amigos que siguen siendo de los más queridos; los compañeros odiosos, los complejos de ser fea, becada, pobre; la separación de mis papás, las “frustraciones” amorosas, las borracheras, las bromas pesadas, la asquerosa directora, los maestros queridos, los pinches la-sallistas…. El Licenciado Luís Treviño Yañez…. Ufff!!!! Hace 10 años de eso.

Y de ahí el miedo: podré nuevamente meterme en la dinámica estudiantil, estudiar, hacer tareas, preparar trabajos, presentar exámenes. Ahora, como entonces tengo muchas expectativas propias y de otros encima mío. Con el agregado que antes solo era mantener la beca y terminar la carrera, en cambio en esta ocasión tendría que ser una formación que se note de manera prácticamente inmediata en mi trabajo diario. Habré de pasar por la evaluación académica, la personal, la profesional, la ética.

4 comentarios:

la brito dijo...

Karina Nalda Castro!!!! Dios mio! te encontre!!! soy Carmen Brito, hablando de escuela :) espero que puedas leer este comentario porque no encontre otra forma de comunicarme contigo, yo sigo en California y me puedes escribir a thebritofamily@yahoo.com o si prefieres a cgorellana@hotmail.com
Me da un chin... de gusto esto, espero oir de ti, cuidate y te mando un beso!!

Carmen

Jose Victor Nunez Nalda dijo...

Hola Kari,

Te quiero mucho. Tu primo.

pepito va a llover

Jesús Alfonso Chávez Velarde dijo...

Hola, mujer:

Debo decir que te estoy escribiendo con cierto miedo. Miedo porque tal vez no te vayas a acordar de mí... Miedo porque nos conocimos hace muchos años y aunque creo que nos profesábamos un sincero cariño en realidad no hubo muchas oportunidades de fomentarlo y quizá ya no exista... Miedo porque el tiempo ha pasado de manera aplastante y seguramente no somos los mismos de esa época adolescente, y tal vez resulte en realidad que a estas alturas no nos conocemos mucho... Son muchos miedos pero en realidad solo uno.

Pues soy el Chávez de la Federal 1, en Mazatlán, no sé si el dato sea suficiente para que me reconozcas, ¿verdad?, pero si no es así ya me lo tendrás que decir. Finalmente encontré tu pista nuevamente, la última vez que supe de tí fue hace como 7 años, cuando fue el reencuentro de la generación de secundaria en Maza, creo que cuando trabajaste con Ricardo Rocha, no sé. Tuve tu correo electrónico y creo que hasta te envié unas fotos de aquella ocasión, después simplemente volviste a desvanecerte y hasta hoy es que he dado nuevamente contigo (bueno, en realidad no fui yo, sino otro amigo, también conocido por tí, que encontró tu blog y me pasó el dato, ya te contaré después, si es que hay oportunidad).

Con el profundo gusto de volverte a ver, aunque sea en foto (por cierto... ¡cómo has cambiado!), me despido de tí esperando no sea la última vez que tengamos contacto, después de todo estamos relativamente cerca pues yo sigo en Querétaro, me enamoré de este lugar y decidí quedarme aquí a vivir.

Te mando mil abrazos y mis mejores deseos para este año que está comenzando.

Tu amigo de siempre: Chávez.
Jesús Alfonso Chávez Velarde.

Jesús Alfonso Chávez Velarde dijo...

¡Jajaja! Perdón, por la emoción de haberte encontrado de nuevo, se me olvidó anotarte mi dirección de correo:

chavezvja@hotmail.com